
Más
allá de esa típica reflexión en la que todos caemos, y más si
acabamos de vivir una ruptura, la película me plantea otra duda: esa
relación tan estrecha que mantiene el protagonista con un sistema
operativo, con un software, con un ente no animado, carente de cuerpo
y mente, por muy inteligente que sea (inteligencia artificial,
oxímoron donde los haya). Decía al principio que creía, que
prefería creer que se trata de una distopía pero ¿y si no es así?
La soledad, la incapacidad de mantener relaciones reales, la
facilidad con la que interactuamos con aplicaciones,
con programas, con ordenadores, ¿no nos puede llevar realmente a
satisfacer nuestras necesidades afectivas con un sistema operativo lo
suficientemente avanzado? La respuesta fácil es que la falta de
contacto físico, de sexo al fin y al cabo, puede ser determinante
para que la respuesta sea negativa. Pero, ¿no hay miles de personas
que prefieren el onanismo (acompañado del youporn) a una decepción
sexual con un congénere? No sé, ¿es una distopía o una utopía?
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